La Chia:
¿qué es?, historia, cultivo, valor nutricional, usos, recetas y más...
La chía (salvia hispánica) es una planta herbácea, oleaginosa y aromática proveniente de América Central muy utilizada por los mayas y por los aztecas desde la antigüedad. Se trata de una planta que pertenece a la familia de la Labiatae lamiaceae (labiadas), al igual que la menta, el tomillo, el romero o el orégano, que posee semillas con gran concentración de ácido graso alfa-linolénico omega 3 lo que la hacen muy deseada como alimento y complemento medicinal.
Índice
¿Qué es la Chia?
La chía es una planta herbácea de la familia de las lamiáceas que puede llegar a medir hasta 1.60 m de alto y entre 4 hasta 60 cm de ancho. Sus hojas son anchas, con ramificaciones opuestas y miden de 4-8 cm de largo por 3-5 cm de ancho. Cuenta con un tallo hueco y cuadrado, y con flores hermafroditas de color entre lavanda y blancas que brotan en ramilletes terminales. Mientras más espacio tenga esta planta para crecer mayor número de ramificaciones poseerá y por tanto mejor será su rendimiento.
La Chía florece entre julio y agosto en el hemisferio norte y sus flores dan lugar a un fruto en forma de aquenio indehiscente cuyas semillas son ricas en mucílago, fécula y aceite. Las semillas se cracterízan por tener unos 2 mm de largo, 1,5 mm de ancho, 1 mm de alto y ser ovalada brillantes y de color pardo-grisáceo a rojizo.
Los mayores productores de chía a nivel mundial son México, España, Colombia y Bolivia, Argentina y Australia, países que promueven la importancia de este superfood a nivel mundial, principalmente en los países en vía de desarrollo, enfatizando sus bondades nutritivas.
Historia de la Chia
La chía, o Salvia hispánica L., es nativa de Mesoamérica, donde su mayor diversidad genética se presenta en la vertiente del Océano Pacífico. Su origen se ubica entre México y Guatemala (Cahill, 2004), siendo originaria de las áreas de montañas del oeste y centro de México (Beltrán-Orozco y Romero, 2003). Hay pruebas que señalan que la semilla de la chía ya era utilizada como alimento en el año 3500 a.C. y ya era cultivada en el Valle de México entre los años 2600 y 900 a.C. por las civilizaciones teotihuacanas y toltecas. También se sabe que, junto al amaranto, el maíz y algunos frejoles, fue uno de los principales alimentos dentro de la dieta de los aztecas (Rodríguez, 1992) citado por Guiotto (2014).
Ya desde antiguo esta semilla fue empleada por la etnia semi-nómada de los tecuexes (grupo chichimeca), ubicados en los actuales municipios de Guadalajara, Zapotlanejo, Acatic, Tepatitlán, San Miguel el Alto, Cuquio, Yahualica, etc. quienes la usaban para pagar tributo a los mexicas.
Si bien esta semilla Inicialmente era solo recolectada de plantas silvestres, luego los tlaxcaltecas y otomíes, traídos a la región por los españoles en la época de la conquista, la domesticaron, creando su cultivo. En esa epoca las contribuciones eran de hasta 1500 toneladas anualesy se empleaba como: alimento, ofrenda a los dioses, y oleaginosa para realizar un aceite como base para pinturas corporales y decorativas.
En el Codex Florentinus que transcribe la Historia general de las cosas de Nueva España de fray Bernardino de Sahagún se comenta que la chia no solo eraa usada por los Aztecas como alimento, medicina, ofrenda ritual pagano, si no que también servía como moneda y como impuesto a los pueblos sometidos por este imperio (Cahill, 2003). Cuando los conquistados españoles llegaron y se hicieron con el poder, la planta fue exterminada casi por completo. Trataron de eliminar las creencias sobre los poderes de esta semilla, enseñar solo su propia religión e implementar nuevos cultivos traídos de Europa; sin embargo, la planta y sus semillas permanecieron presentes en algunos países latinoamericanos como Guatemala, el Salvador y Nicaragua. (Ayerza, 2006).
Aunque la semilla se mantuvo desaparecida por unos 500 años, a mediados de los años sesentas se empezaron a reconocer sus potenciales nutritivos y medicinales y, por ende, a venderse en algunas tiendas naturistas de Estados Unidos. Algunos años después, en 1980 nace en el mercado estadounidense un producto llamado “Chia Pets”, piezas decorativas de arcilla con forma de mascotas a las que se les aplicaban semillas humedecidas de chía que crecían frondosamente a los pocos días. Este producto provocó un aumento de la demanda de esta semilla a nivel mundial posicionándola en el mercado (Ayerza, 2006).
En los últimos años, la chía ha generado un creciente interés debido a la revalorización de sus múltiples usos y propiedades, principalmente la cantidad de grasa, fibra y proteína de gran valor nutritivo que posee para ser usada en la industria alimentaria (Vásquez-Ovando et al., 2007). En el 2009 fue declarada novel food (nuevo alimento) por la Unión Europea, lo que promovió su comercialización y distribución en dicho continente. Actualmente es considerada un “Súper Alimento” y experimenta un gran crecimiento en la demanda, producción y comercialización mundial de productos en base a sus semillas.
El Perú viene abriéndose paso exitosamente en la comercialización de esta semilla debido a que posee condiciones aptas para el desarrollo de su cultivo.
Nombre común de la Chia
Español | Chía, Salvia Hispánica, Salvia española, Artemisa española, chía mexicana, chía negra |
El Salvador, Guatemala | Semillas de Chan |
Nombre científico de la la Chia
Salvia Hispánica L.
Taxonomía de la la Chia
Reino | Plantae |
División | Magnoliophyta |
Clase | Magnoliopsida |
Subclase | Asteridae |
Orden | Lamiales |
Familia | Lamiaceae |
Subfamilia | Nepetoideae |
Tribu | Mentheae |
Género | Salvia |
Especie | Salvia hispanica |
Sinonimia de la la Chia
- Kiosmina hispanica (L.) Raf., Fl. Tellur. 3: 92 (1837).
- Salvia neohispanica Briq., Annuaire Conserv. Jard. Bot. Genève 2: 137 (1898), nom. superfl.
- Salvia tetragona Moench, Methodus: 373 (1794).
- Salvia prysmatica Cav., Descr. Pl.: 14 (1801).
- Salvia chia Sessé & Moc., Fl. Mexic.: 9 (1893), nom. illeg.
Salvia schiedeana Stapf, Bull. Misc. Inform. Kew 1896: 19 (1896).
Etimología de la la Chia
La palabra ‘chía’ es una adaptación españolizada del término nahua chían o chien (plural), que en náhuatl significa “semilla de la que se obtiene aceite” (Watson, 1938)
También se dice que Chía es una palabra de origen Maya que significa “Fuerza”.
El nombre científico Salvia Hispánica proviene del del latín salvus, que significa ‘salud’ y ‘sal veo, ‘curar’, en referencia a las virtudes medicinales de las plantas de este género, y la denominación Hispánica que es el epíteto latino para referirse a ‘de Hispania’.
Cultivo, distribución y hábitat de la Chia
- Hábitat
- Distribución
- Cultivo
Hábitat de la Chia
El cultivo de chía suele darse en zonas donde llueva al menos una vez por semana o un promedio de 800 a 900 mm por año bien distribuida, áreas con temperaturas no mayores de los 33°C, para evitar la resequedad del polen que afecte la polinización. Además, se requieren vientos menores de los 20 km por horas, para evitar la caída de la planta y suelos ligeros a medios, bien drenados y no demasiado húmedos. Como la mayoría de las salvias, tolera la acidez y la sequía, requiere abundante luz solar, poca sombra y no soporta las heladas.
En pequeñas parcelas de cultivo se emplean métodos manuales tradicionales de siembra directa, como el voleo, espeque y chorrillo. Estos métodos se pueden realizar sin labranza previa del suelo, pero traen consigo problemas que dificultan procesos posteriores a la siembra.
Desde la siembra hasta la cosecha de la chía transcurren entre 120 a 130 días. Cuando el 80% del follaje de cada planta pierde color tornándose de una tonalidad oscura que le da la apariencia de sequedad o muerte, es el momento de cosecharla, para lo que se debe cortar a ras del suelo formando pequeños moños sobre los surcos para terminar su secado. Una vez secada la planta se pasa al aporreo, etapa donde, con ayuda de palos cortos, se golpea cada uno de los moños sobre una carpa de plástico para que se desprendan las simientes. Al ser un producto con un largo período de conservación puede encontrarse a la venta todo el año.
Distribución de la Chia
Cultivo de la Chia
Distribución geográfica de la Chia
Ayacucho, Puno, Arequipa
Disponibilidad Estacionaria de la Chia
- Enero, Febrero, Marzo, Abril, Diciembre
Variedades de la Chia
De acuerdo a Cahill (2005), existe gran diversidad genética entre poblaciones silvestres de Salvia hispánica L. esto se debe muy probablemente a la abrupta geografía de donde es nativa, su extensa área de distribución y su sistema de polinización altamente autógamo (autofecundación). Se han descrito dos ideotipos o variedades de chía:
A pesar de la existencia de las variedades mencionadas, en la actualidad la investigación científica se realiza en base a genotipos y accesiones procedentes de localidades productoras y de origen de la chía. Los genotipos descubiertos son: iztac 1, iztac 2, tzotzol, miztic y tliltic.
-
Salvia hispánica L. var. Chionocalyx Fernald,
con localidad tipo en Uruapan, Michoacán
-
Salvia hispánica L. var. intonsa Fernald,
cuya localidad tipo es Buena Vista, Departamento de Sta. Rosa, Guatemala
-
Tzotsol
es la variedad más reconocida y contiene un 80% de semilla negra y un 20% de semilla blanca.
Valor nutricional de la Chia
La semilla de chía es muy rica en nutrientes como: proteínas, calcio, boro (mineral que ayuda a fijar el calcio de los huesos), potasio, hierro, ácidos grasos como omega 3, antioxidantes y también en oligoelementos tales como el magnesio, manganeso, cobre, zinc y vitaminas como la niacina, entre otras.
Cuenta con dos veces más proteínas que cualquier otra semilla, cinco veces más calcio que la leche entera, dos veces la cantidad de potasio presente en los plátanos, tres veces más antioxidantes que los arándanos, tres veces más hierro que las espinacas y siete veces más omega 3 que en el salmón. Esta semilla contiene alrededor de 40% de carbohidratos; de los cuales, 30% es fibra insoluble, 3% es fibra soluble y el resto son almidones esenciales.
Su niveles de calcio son tan elevados que cubren el 63% de las cantidades diarias recomendadas y las de magnesio en 95%. Los ácidos grasos esenciales insaturados que posee son 60 % el alfa-linoleico (omega 3) y 20 % el linoleico (omega 6) que ayudan a prevenir las enfermedades cardiovasculares. Además, contiene antioxidantes como el ácido cafeico, clorogénico y cinámico; junto con flavonoides (miricetina, quercetina y kaempferol), que ayudan a disminuir el estrés oxidativo y la inflamación en el síndrome metabólico.
Otro beneficio de la chía está en su alta composición en fibra que contribuye a regularizar el tránsito intestinal, reduce los lípidos, controla la glucemia en personas con diabetes y es muy útil en el tratamiento para bajar de peso. También contiene aminoácidos esenciales, como el glutámico, arginina, leucina, valina, serina, fenilalanina; los cuales colaboran en la formación de tejidos, enzimas, sangre, hormonas, anticuerpos y material genético.
Asimismo, es cardioprotector y tiene propiedades antinflamatorias, antitrombóticas y antiarrítmicas. Tiene un efecto hepatoprotector, cumple funciones energéticas y de reserva metabólica, además es considerado un antidiabético, posee un efecto protector contra la artritis reumatoide por sus propiedades antinflamatorias y aporta efectos terapéuticos en patologías, como la arterosclerosis, el cáncer y la cardiopatía isquémica.
Beneficios para la salud de la Chia
La chía es una importante fuente de vitaminas y minerales como el calcio y el magnesio, así como de antioxidantes, grasas y proteínas.
Contraindicaciones o efectos secundarios
Hasta el momento no existen pruebas científicas que consideren esta semilla como un factor de riesgo para la salud. Sin embargo, aunque pocos, hay casos documentados de alergia a la chía y, en general, debe consumirse con precaución si:
Se sufre problemas digestivos como gases, enfermedad de Crohn, inflamación o distensión abdominal, etc.
Se sufre divertículos y debe realizar una dieta exenta de granos enteros por el posible riesgo de desencadenar daño luminal y sangrado diverticular.
10 Porciones por Kilogramo | |
Tamaño de porción | 100g |
Cantidad por porción Calorías |
360 |
Cantidad por 100g | |
Energía | 1,507 kJ |
Grasa Total | 32.5 g |
Sodio | 3 mg |
Carbohidratos totales | 31.8 g |
Carbohidratos disponibles | 1.7 g |
Fibra Dietaria | 30.1 g |
Proteínas | 23.4 g |
Calcio | 478 mg |
Fósforo | 725 mg |
Zinc | ● |
Hierro | ● |
Potasio | 635 mg |
Agua | 7.7 g |
Cenizas | 4.6 g |
Vitamina A | ● |
Tiamina (B1) | ● |
Riboflavina (B2) | ● |
Niacina (B3) | 3.20 mg |
Vitamina C | 17.16 mg |
Acido Fólico (B9) | ● |
β-Caroteno | ● |
Fuente: Tablas peruanas de composición de alimentos – Centro Nacional de Alimentación y Nutrición – Ministerio de Salud – Perú |
Productos derivados y formas de consumo de la Chia
Usos de la Chia
El uso de esta semilla es fundamentalmente culinario y se basa en las extraordinarias propiedades nutritivas que la planta proporciona.
- Culinario
- Medicinal
- Industrial
- Ritual
Uso culinario de la Chia
La forma más común de consumir las semillas de chía es mezclándolas con agua o zumo. La ración habitual es de 10 a 20 gramos y suele consumirse como un ingrediente complementario en otros platos principales como: ensaladas, batidos, yogures, panes, galletas, zumos, bebidas calientes, etc. También existen suplementos alimenticios de esta semilla.
Los brotes tiernos de chía se consumen como verdura cruda o cocida y suelen ser usados en ensaladas.
Su consumo suele estar ligado a beneficiarse de sus bastas propiedades nutritivas para lo que se sugiere su consumo frecuente; la cantidad recomendada es de 3 a 7 cucharadas soperas al día, lo que equivale a una porción de aceites y grasas con proteína. Aunque sea mezclada con diferentes alimentos no pierde sus propiedades y no es necesario remojarla para obtener mejores beneficios, como se suele creer.
Las semillas remojadas en agua liberan el mucílago, produciendo un líquido gelatinoso prácticamente insípido y que se recomienda en planes de regimen dietario. Las semillas pueden secarse y molerse para hacer una harina fina y de intenso sabor, llamada pinole, que se consume principalmente como dulce.
Uso medicinal de la Chia
Entre los principales beneficios de las semillas en la prevención de enfermedades están:
Protección cardiovascular: debido a su alto contenido de omega 3 brinda un efecto cardioprotector y brinda propiedades antiinflamatorias, vasodilatadoras y antitrombóticas, que contribuyen a prevenir la presión arterial alta, la hipercolesterolemia y la hipertrigliceridemia.
Mejora el tránsito intestinal: su alto contenido en mucílagos (fibra soluble que aumenta de volumen en contacto con el agua) estimula el movimiento intestinal mejorando el estreñimiento.
Mejora hiperglucemias: regula los niveles de azúcar en la sangre mediante su fibra que “atrapa” parte de los azúcares para ser absorbidos de manera más gradual.
Tiene propiedades antiinflamatorias, vasodilatadoras y antitrombóticas
Es una gran fuente de energía y al consumirla genera una sensación prolongada de saciedad.
No contiene gluten, por lo que es apta para celíacos y personas intolerantes al trigo.
Uso industrial de la Chia
Uso ritual de la Chia
Según cuenta Claudia Monika Haros, investigadora del CSIC en el Instituto de Agroquímica y Tecnología de los Alimentos (IATA), hace unos 3.000 años para los mayas y los aztecas “la chía era una semilla sagrada, y como tal formaba parte de algunos ritos paganos en los que estas poblaciones se la ofrecían a sus dioses”.
En esos tiempos se hacían ofrendas de brotes de chía a Chicomecóatl, la diosa del maíz, durante la fiesta de la veintena de hueytozoztli. Asimismo, durante la veintena ritual de hueytecuílhulhuitl, se preparaba pinole (un tipo de harina) de semillas de chía tostadas hasta llenar una embarcación, que se hacía flotar entre los asistentes, que tomaban de ella una porción hasta vaciarla toda. A su vez, los purépecha de Michoacán usaban el pinole para fabricar unos pequeños tamales que empleaban como ofrenda en el altar de sus muertos.